Una altura más elevada estaría más cerca del Sol, por lo que la temperatura tendría que ser más cálida. Sin embargo, vemos todo lo contrario. Entre más alta es una montaña, más frío hace (¡no olvidemos el Everest!), y los aviones necesitan mantener su temperatura controlada. Si la realidad es distinta a lo que indicaría la teoría, ¿por qué hace frío en las alturas?
¿Por qué hace frío en las alturas?
Hace frío en las alturas porque hay una menor presión atmosférica, lo que hace descender la temperatura. A nivel del mar, la presión atmosférica conserva el calor cerca de la superficie. Las partículas del aire están concentradas en un espacio reducido, chocando unas con otras y liberando esa energía.
No obstante, en la medida de que la altura aumenta, la atmósfera se hace más delgada y la presión disminuye. Una presión menor hace que el aire se expanda. Así, las mismas partículas gaseosas tienen que recorrer una distancia mayor. Eso gradualmente disminuye el calor que pueden liberar, pues encontrarán menos partículas con las que chocar y la energía será liberada en un área más grande.
La distancia entre el Sol y la Tierra es de casi 150 millones de kilómetros; la cima más alta del planeta es el monte Everest, y mide casi 9 km. En este contexto, el ascender tan solo unos m o km por encima del nivel del mar no produce ninguna diferencia significativa para recibir más de la luz y el calor del Sol. Aunque natural y comprensible, la suposición de que “a mayor altura, más cerca del Sol y, por lo tanto, más calor” es así descartada.
Fuentes:
io9 (2010). Why is it colder at high altitudes?.
Scientific American (2018). If heat rises, why does the temperature decrease at higher elevations?.
The Naked Scienists (2010). Why is it colder at higher altitudes?.